¿Por qué la digitalización de los puntos de ventas mejora la experiencia de compra?

Equipos Epson POS integran herramientas que permiten gestionar el proceso de venta, aumentar la comercialización y mejorar el servicio de atención al cliente, por medio de la inteligencia artificial y otras integraciones.

Si bien el e-commerce ha tenido un crecimiento exponencial a raíz de la pandemia, el regreso de los clientes a las tiendas físicas es un hecho. En un reciente estudio, la consultora Bain & Company afirmó que el 75% de los consumidores chilenos regresaría a la compra presencial, esta vez valorando mucho más la experiencia de compra. Una realidad que ya se observa en los principales centros comerciales del país, desde que las restricciones comenzaron a flexibilizarse.

Lo anterior plantea, tanto al retail como a los almacenes de barrio, el gran desafío de optimizar sus procesos de venta en terreno y así cumplir las expectativas de los nuevos consumidores. En este contexto la transformación de los puntos de venta parece ser crucial, pues hoy en día equipos POS integran herramientas que permiten gestionar el proceso de venta, aumentar la comercialización y mejorar el servicio de atención por medio de la inteligencia artificial, la nube, la minería de datos, mailing, chat y otros recursos.

¿El resultado? Nuevas oportunidades para clientes y dueños de establecimientos, en el marco de un comercio activo que, al estar conectado a la red, posee movilidad, puede centralizar la información para las cadenas de locales y facilitar las ventas online a través de la geolocalización. También mantener trazabilidad e incluso realizar un marketing dirigido.

En este contexto, los equipos Epson han incorporado aplicaciones de conectividad como WiFi, bluetooth o NFC, que permiten el desplazamiento. “De esta manera, un vendedor puede finalizar la transacción en cualquier lugar de la tienda con una tablet emparejada a una impresora móvil, agilizando el servicio, haciéndolo más personalizado y cómodo para el cliente y permitiendo aumentar de manera eficiente las  ventas diarias”, explica Mariana Molina, gerenta de producto de Soluciones Puntos de Ventas y Etiquetas Epson Chile y Bolivia.

Por otro lado la línea Omnilink posee multipuertos y PC industrial incorporado permitiendo funcionar 24/7. Admite la conexión directa a un monitor, mouse, lector de códigos de barra, cajas de dinero y otros periféricos. Reduce hasta en un 70% el espacio utilizado y permite ser utilizado como servidor, manejando ciertas impresoras como comanderas u otras impresoras en diferentes cajas.

Todas características, altamente valoradas por los comerciantes. “Desde que abrimos la tienda utilizamos una impresora térmica de Epson que agiliza mucho el proceso de venta e impresión de la boleta, dado que no toma más de un minuto, en promedio. Eso evidentemente ayuda a mejorar la conversión y dejar a nuestros clientes satisfechos. Además, tiene un tamaño muy apropiado para ubicarla en la zona de la caja, el documento que se genera es claro y de excelente calidad”, aseguró Juan Pablo Astorga, socio de Fibra, almacén especializado en productos para alérgicos alimentarios, en la comuna de Ñuñoa.

De esta manera, Epson aporta soluciones tecnológicas para comercios de diferentes tamaños, adaptándose a sus necesidades, aportando eficiencia y mejorando las experiencias de los clientes, consumidores cada vez más exigentes.

Autor

  • Francisco Carrasco, periodista chileno especializado en tecnologías de la Información desde hace más de 15 años. Trabajó como periodista y editor en las revistas especializadas ComputerWorld y PC World Chile de la editorial americana IDG durante 6 años y fue editor para Latinoamérica de CIO America Latina, y PC World en Español, y mantiene su blog hace 10 años www.it-review.cl. Además en los últimos años ha cumplido roles de editor y asesor de contenidos para varias empresas tecnológicas multinacionales tanto del área del software como del hardware. Así también es colaborador de tecnología por cerca de 2 años de Ediciones Especiales del Diario La Tercera desde 2010-2012 y posteriormente colaboro en Ediciones Especiales de El Mercurio y Chile Tecnológico.